La barba está de moda desde hace años. De hecho, no es descabellado afirmar que nunca ha pasado de moda. La moda siempre impone cambios en el estilo de barba, y en los últimos años la barba desaliñada ha dado paso a algo más ordenado y prolijo. En cualquier caso, lo cierto es que no ha disminuido la cantidad de hombres que llevan algún tipo de barba.
Por lo tanto, resulta extraño que no se hable lo suficiente sobre la pérdida de pelo en la zona de la barba. Los tratamientos contra la caída del cabello están recibiendo mucha atención, pero no ocurre lo mismo con los trasplantes de barba. ¿Será que no hay suficiente demanda por este tipo de trasplantes? ¿Por qué un hombre necesitaría uno? ¿Cómo funcionan?
Sigue bajando para que descubras las respuestas a todas estas interrogantes.
La atracción de las barbas
Los hombres se dejan crecer la barba por muchos motivos diferentes. Los jóvenes pueden dejársela para hacer ver que ya han alcanzado la madurez. A otros simplemente no les gusta tener que afeitarse a diario. Sin embargo, la mayoría se dejan crecer la barba porque consideran que así se ven más guapos. Un estudio reciente que se llevó a cabo en la Universidad de Queensland sugiere que podrían tener razón, al menos desde el punto de vista femenino. El estudio demostró que las mujeres encuentran más atractivos a los hombres con barba. Al parecer, la barba transmite madurez, virilidad y masculinidad.
Sea cual sea la razón, la barba sigue siendo una parte importante de la identidad masculina, y no hay señales de que eso vaya a cambiar. La barba puede convertirse en una parte esencial de la personalidad de un hombre. Por lo tanto, la pérdida de pelo en esa zona puede afectar la confianza y la autoestima de una persona, de la misma manera que lo hace la pérdida de pelo en el cuero cabelludo.
¿Qué es lo que causa la caída del pelo en la barba?
El término médico para la pérdida de pelo en la barba es alopecia barbae. Puede ser causada por diversos factores, como la alopecia areata (un trastorno autoinmune), los traumatismos o las quemaduras. Los granos que salen por el afeitado, también conocidos como pseudofoliculitis de la barba, pueden provocar inflamación en la cara y el cuello. En los casos más graves, también pueden bloquear el crecimiento de nuevos vellos, haciendo que la barba tenga un aspecto irregular. ¡Hasta pueden dejar cicatrices permanentes! La hipotricosis, por su parte, es una forma congénita de pérdida de pelo que puede aparecer incluso en individuos completamente sanos.
Posibles tratamientos
Existen varios tratamientos contra la pérdida del vello en la barba, que no llegan a ser tan comprometedores como la cirugía. Medicamentos como los corticoesteroides pueden combatir la inflamación, y se han vuelto muy populares como tratamiento para la alopecia areata. Se pueden aplicar por vía tópica, o inyectarse en la piel, en las zonas afectadas por la alopecia. El minoxidil es otro medicamento tópico que se usa para tratar la pérdida de cabello por patrones, pero también es eficaz en el tratamiento de la alopecia barbae.
Cuando el problema son las protuberancias que dejan las cuchillas, se puede encontrar una solución adoptando un régimen de afeitado menos abrasivo. En estos casos, bastará con afeitarse más superficialmente y con menos frecuencia. Otros tratamientos para mitigar el problema son los procedimientos cosméticos, como la micropigmentación, que busca disimular las zonas que presentan adelgazamiento capilar.
Pero si estos tratamientos no son suficientes, la solución definitiva puede ser un trasplante de barba.
¿En qué consiste el trasplante de barba?
En los últimos años ha aumentado la popularidad de los trasplantes de barba. Las cifras recopiladas por la Sociedad Internacional de Cirugía de Restauración Capilar revelaron que los tratamientos de restauración de vello facial representaron el 1,5% de todas las cirugías de restauración capilar realizadas en 2010. En 2022, ese porcentaje ya había aumentado hasta el 4%, y no hay señales de que la tendencia vaya a disminuir. El trasplante de barba ofrece una buena forma de mejorar el vello facial cuando éste es naturalmente escaso, o cuando ha quedado reducido debido a la pérdida de vello. Incluso puede brindar una cobertura completa, o reforzar las zonas donde no hay pelo.
En los trasplantes de barba se utilizan las mismas técnicas quirúrgicas que en los trasplantes de cabello convencionales. Eso significa que los folículos pilosos se extraen de una zona donante de la cabeza, y se trasplantan en la cara. Al igual que con los trasplantes de pelo del cuero cabelludo, el número de pelos necesarios para un trasplante varía en función de las necesidades individuales. Si lo realiza una clínica de confianza y se lleva a cabo teniendo en cuenta las proporciones faciales y la estructura ósea, el trasplante puede brindarle al paciente una barba fuerte y de aspecto natural.
Las tasas de éxito de los trasplantes de barba son buenas. Los cirujanos experimentados pueden predecir el crecimiento capilar que puede esperar una persona, y desaconsejarán la realización de la cirugía cuando estimen que el resultado no se podrá ajustar a las expectativas del cliente. En hombres, es posible alcanzar mejores resultados cuando se dispone de una cabellera sana y sólida. Generalmente los resultados son menos óptimos cuando el paciente ya se está quedando calvo, o cuando presenta una textura de pelo menos deseable.
Conclusión
Puede que los trasplantes de barba no tengan el mismo nivel de aceptación que los trasplantes capilares convencionales, pero esa tendencia ha ido cambiando. Las cifras de trasplantes de barba siguen aumentando año tras año. Este aumento se debe a que muchos hombres consideran que su barba es tan importante para su autoestima como su cabello, y prefieren no perder ninguno de los dos.
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