Alrededor del mundo, millones de personas se ven afectadas por la caída del cabello. Ya sea por causas genéticas, cambios hormonales, estrés u otros factores, la caída del cabello puede tener un impacto significativo en nuestra autoestima y bienestar general. En los últimos años hemos sido testigos de un auge en el mercado de los tratamientos contra la caída del cabello, y las opciones basadas en agujas han ganado mucha popularidad.
En este artículo profundizamos en las razones que explican este aumento en el interés por los procedimientos contra la calvicie basados en agujas. ¡Sigue leyendo para que descubras más!
¿Qué son los tratamientos basados en agujas?
En primer lugar, debemos tener claro qué tratamientos contra la caída del cabello entran en la categoría de “basados en agujas”. En efecto, principalmente se trata de tres procedimientos: la terapia de regeneración celular (RC), la mesoterapia y la micropigmentación capilar (MSP). El microneedling también se utiliza para tratar la caída del cabello, pero como es principalmente un procedimiento de rejuvenecimiento de la piel, no lo hemos incluido en nuestro análisis. ¡Vamos a revisar los tres tratamientos que hemos destacado!
Regeneración celular
La RC consiste en extraer una pequeña cantidad de sangre del paciente, y procesarla en una centrifugadora para separar el plasma de los demás componentes de la sangre. Las plaquetas son células sanguíneas que contienen diversos factores de crecimiento y proteínas, y que desempeñan un papel crucial en el proceso de curación natural del organismo.
Una vez obtenido el plasma, la solución se inyecta directamente en el cuero cabelludo. La elevada concentración de plaquetas que hay en el plasma estimula los folículos pilosos, favorece el crecimiento del cabello y mejora el estado general del cuero cabelludo.
Mesoterapia
La mesoterapia se originó en Francia en la década de 1950. Durante este procedimiento, se inyectan pequeñas cantidades de medicamentos, vitaminas, minerales y otras sustancias activas en zonas concretas de la capa media de la piel (el mesodermo).
Cuando se usa para combatir la caída del cabello, la mesoterapia se suele aplicar como tratamiento complementario, para ayudar a promover el crecimiento del cabello y combatir su debilitamiento. El objetivo de esta técnica es administrar una combinación de nutrientes y medicamentos directamente en los folículos pilosos, brindándoles el apoyo necesario para su crecimiento y revitalización.
MSP
La MSP es un tratamiento versátil, que puede utilizarse para crear el efecto de una cabeza bien rapada o afeitada. También se utiliza para añadir densidad a las personas que tienen el cabello largo pero fino, reduciendo el contraste entre la piel y el pelo.
Durante la MSP, se aplican diminutos puntos de pigmento en el cuero cabelludo, con un equipo especializado (una máquina de microagujas o de tatuajes). Los puntos pigmentados se colocan estratégicamente, para imitar el aspecto de los folículos pilosos o de la barba incipiente, creando la ilusión de una cabeza con más pelo, o de un cuero cabelludo afeitado al ras. El color del pigmento se adapta al color del pelo y al tono de la piel, para garantizar un resultado de aspecto natural.
¿Por qué estos tratamientos son tan populares?
Una de las principales razones que explican la popularidad de los tratamientos anticaída con agujas es su naturaleza no quirúrgica. No suelen requerir incisiones ni puntos de sutura, lo que reduce el riesgo de complicaciones, haciéndolos accesibles para un mayor número de personas. Además, gracias a su carácter no quirúrgico, estos tratamientos apenas dejan cicatrices.
Los tratamientos basados en agujas ofrecen versatilidad y opciones de personalización adaptadas a las necesidades individuales. Esto permite adoptar un enfoque personalizado, garantizando que el tratamiento aborde los problemas específicos, brindando los mejores resultados posibles. Además, los tratamientos con agujas pueden realizarse en varias zonas del cuero cabelludo, por lo que son adecuados para distintos patrones y estadios de pérdida capilar.
Aunque implican el uso de agujas, estos tratamientos suelen tolerarse bien, y causan molestias mínimas. Las agujas utilizadas son increíblemente finas, por lo que sólo se producen ligeras sensaciones durante el procedimiento. Además, el tiempo de recuperación asociado a los tratamientos anticaída con agujas suele ser bastante breve.
Para las personas que prefieren métodos no farmacéuticos, los tratamientos con agujas son una alternativa viable. En vez de recurrir a medicamentos sistémicos que pueden tener efectos secundarios, estos tratamientos se enfocan en estimular los procesos naturales de crecimiento del cabello. Por lo tanto, los tratamientos con agujas resultan atractivos para quienes buscan soluciones libres de fármacos, o para quienes no toleran las intervenciones farmacéuticas.
La popularidad de los tratamientos contra la caída del cabello basados en agujas se ve reforzada por un apoyo científico cada vez mayor. Se han realizado numerosos estudios para evaluar la eficacia de la RC y la mesoterapia, y los resultados han sido prometedores. Estos estudios han demostrado que los tratamientos basados en agujas pueden producir mejoras significativas en la densidad, el grosor y el crecimiento general del cabello. Gracias a la contundencia de las pruebas científicas, cada vez más personas optan por estos tratamientos como una solución fiable para sus problemas de pérdida capilar.
Conclusión
Los tratamientos contra la caída del cabello basados en agujas han ganado popularidad por su eficacia, su carácter no quirúrgico y sus mínimas molestias. Con la orientación adecuada, estos procedimientos pueden proporcionar una renovada sensación de confianza, ayudando a muchas personas a recuperar el esplendor de su cabello.
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