La pérdida de cabello parece haber tenido un aumento en años recientes, pero los científicos no se han quedado de brazos cruzados tampoco. Apoyados por los avances tecnológicos, han estudiado los sofisticados sistemas biológicos que le permiten a nuestro cuerpo funcionar. La pérdida de cabello ha recibido una atención significativa, llevando así al desarrollo de métodos revolucionarios para tratarla.
Para mujeres y hombres preocupados por este problema, la búsqueda de un remedio para la pérdida de cabello surge de algo más que una simple necesidad estética. El recrecimiento del cabello refuerza el sentido de una identidad deteriorada. Y la industria del cuidado del cabello se ha movido rápidamente para ofrecer soluciones estables, confiables, efectivas y convenientes.
En este artículo, estamos visitando nuevamente los desafiantes períodos de investigación y progreso desde los primeros días hasta el presente, y te dejaremos algunos comentarios sobre el futuro de la tecnología de recrecimiento.
¿Qué hace que sea un reto el tratamiento de la pérdida de cabello?
Producir con satisfacción una solución para la pérdida de cabello requirió años de investigación por una razón obvia: es una condición complicada. Nuestro cabello se cae por numerosas razones y definir estas razones requiere una examinación de cerca.
Puede ser el resultado de una condición médica, factores genéticos, o consecuencia de un estilo de vida nada regulado. Para cada caso, es necesario un tipo de tratamiento especializado. Tales problemas han prolongado la búsqueda científica para entender la pérdida de cabello y el recrecimiento.
Los inicios de los métodos para tratar el cabello
A mediados del siglo XX, se le presentaron al público los pasos iniciales de la industria de tratamiento del cabello. Estos fueron recibidos con gran decepción debido a un simple hecho: fueron inefectivos. Creada con diferentes combinaciones de cremas y aceites, esta primitiva “tecnología” no pudo ganar la batalla contra la pérdida de cabello.
La única opción que quedó para la gente en ese momento era esconder sus áreas calvas usando una peluca o tratar de cubrirlas con un peinado cruzado. Desde entonces, la ciencia ha encontrado otros remedios prácticos que sí hacen crecer nuestro cabello.
Usar sueros de crecimiento
Tomando nota de sus primeras soluciones, los laboratorios comerciales desarrollaron múltiples cremas y sueros para los consumidores. Estos productos fueron aplicados en el cuero cabelludo y resultaron en un crecimiento limitado.
Similares soluciones pueden ser encontradas en el mercado hoy en día. Minoxidil y finasteride siendo dos de ellas, son medicamentos que han probado ser restauradores. Se dice que funcionan en hombres principalmente, pero cuando las condiciones lo permiten, las mujeres también pueden beneficiarse de su efecto.
Presentando los trasplantes de cabello quirúrgicos
Tras ver el limitado impacto de las cremas y sueros, los científicos y consumidores se enfocaron más en los trasplantes de cabello quirúrgicos. Como el nombre lo sugiere, el cabello de una parte de la cabeza (usualmente la parte de atrás) es cultivado y trasplantado quirúrgicamente a áreas afectadas por pérdida de cabello. Estas áreas incluyen la sien, la coronilla y las entradas.
Aunque el método funciona, no es adecuado para todo el mundo. Uno debe tener un área donante apropiada para que un trasplante tenga éxito y, por otro lado, el trasplante de cabello no es un tratamiento apropiado para algunos tipos de pérdida de cabello. Solo un cirujano de trasplantes de cabello calificado puede informar si eres o no un buen candidato para un trasplante.
Terapia láser de bajo nivel
La terapia láser de bajo nivel (LLLT) es otro procedimiento tecnológicamente avanzado que ha surgido en años recientes. Este método ha probado ser efectivo al prevenir la pérdida de cabello. Implementado al usar bandas o gorras láser, LLLT no produce obstáculos para la rutina diaria de una persona.
El proceso responsable de estimular el recrecimiento del cabello a través del LLLT es conocido como fotobioestimulación. Aunque los científicos están en el proceso de investigar aún más este método, pronostican un futuro optimista para su uso. El proceso detrás de la fotobioestimulación implica cinco fases que estimulan el recrecimiento del cabello:
- Se incrementa la producción de adenosín trifosfato (ATP).
- Este incremento da energía a los folículos pilosos.
- Mayores cantidades de oxígeno y nutrientes son dirigidas hacia las células, impulsando la circulación de la sangre.
- Tal incremento disminuye la dihidrotestosterona (DHT), una hormona que contribuye con la pérdida de cabello.
- Las células se reproducen más rápido y el ritmo de miniaturización de los folículos pilosos disminuye.
Crecimiento del cabello con exosomas
La pandemia del coronavirus detuvo muchas actividades, pero no la investigación. Por el contrario, animó a los investigadores a pasar más tiempo realizando pruebas y produciendo tratamientos innovadores. Las exosomas eran uno de estos tratamientos experimentales considerados para impulsar el recrecimiento del cabello. Estas nanopartículas, descubiertas hace 35 años, estimulan la comunicación de las células.
Sorpresivamente, las exosomas contienen ARN mensajero (ARNm), también encontrado en las vacunas contra el coronavirus. Teóricamente, tales inyecciones instruyen a las células del cabello para que se extiendan. Ya que las exosomas constituyen partículas de proteína, tienen el poder de regenerar tejidos e incluso folículos pilosos.
Caída del cabello con tratamientos tópicos
Una mayor investigación sobre la caída de cabello genera esperanza de que las cremas tópicas también puedan ofrecer resultados. En este punto, los expertos en pérdida del cabello están trabajando en dos productos.
El primero es una crema basada en osteopontina llamada FOL-005, enfocada en los hombres, mientras que el otro producto es Breezula, el cual promete reducir la pérdida del cabello con muy pocos efectos secundarios. Breezula ha sido probado solo en hombres hasta ahora, pero los científicos están trabajando en adaptarlo para mujeres también.
Mejora de la densidad
Afortunadamente, algunas personas simplemente necesitan un cabello más denso y no un recrecimiento completo. Una persona debe tener aproximadamente 2200 pelos de cabello por pulgada cuadrada. Uno mismo puede tratar de encontrar la densidad exacta, pero podría ser más fácil (¡y menos tedioso!) consultar a un experto para descubrir si hay algo de qué preocuparse.
Y la densificación capilar no siempre necesita tratamientos quirúrgicos. Existen diversos productos que ayudan a añadir densidad en el cabello tanto para hombres como mujeres, cada uno con pequeñas diferencias. La mayoría de ellos son producidos en forma de champú, acondicionadores o sueros para incrementar la densidad.
Pensamientos finales
Desde la primera crema años atrás hasta el uso de láseres y trasplantes, la industria del recrecimiento del cabello ha progresado rápidamente y se acercan más desarrollos emocionantes en este ámbito. Pero, recuerda que existen diferentes causas de pérdida de cabello y que hay personas con necesidades diferentes; no existe una única solución que funcione para todo el mundo.
La mejor manera de encontrar una solución que funcione es consultando con un experto. Reserva una consulta gratuita con un especialista de Vinci Hair Clinic. Tenemos clínicas en todo el mundo, y usamos tecnología de punta para combatir la pérdida de cabello. ¡Ponte en contacto hoy mismo y reserva tu cita!